Amazon le apuesta al futuro inaugurando, el pasado 22 de enero, su nueva Tienda llamada Amazon Go. En esta tienda de comestibles ubicada en Seattle Estados Unidos, se logra crear un sistema para que los usuarios no deban pasar por una caja registradora para realizar los pagos de su compra.
En su entrada se encuentran unos escáneres similares a los que se encuentran en los sistemas de transporte masivo de las grandes ciudades de los Estados unidos, donde los visitantes deberán escanear un código QR generado desde la aplicación de Amazon previamente instalado en el móvil. Esta tienda cuenta en su interior con un conjunto de cámaras y sensores para identificar cuando alguien toma un producto con la intención de compra.
La promesa de Amazon es acabar con las largas filas apostando al sistema de débito automático sin alguna interacción del cliente con los empleados de la tienda, quienes solo se encuentran inicialmente para realizar labores de acompañamiento ante cualquier duda, labores de cocina y solo personal necesario para surtir los estantes.
El sistema de la tienda trabaja para crear una figura tridimensional de cada potencial comprador, siendo capaz de memorizar patrones personalizados de cada individuo y aprendiendo de los mismos. Tanto así que el sistema puede detectar cuando un usuario desiste de comprar algún producto y lo debita del total de la compra.
El sistema también cuenta con sensores de presión ubicados en las repisas para detectar si se está agotando algún producto y necesita más inventario.
Experiencia de Usuario
En esta primera semana transcurrida desde que la tienda abrió sus puertas al público, ha quedado en claro que el sistema aún presenta ciertas fallas. Un Youtuber evidencio en su canal que es posible realizar un robo sin ser detectado por los sensores ubicados en cada rincón de la tienda. Otro caso conocido fue el de una reportera de la CNBC que cubría la inauguración en vivo, que al experimentar ante cámara como es el proceso de compra, pudo comprobar que al salir de la tienda no le cobraron un producto. La representante de Amazon presente en el lugar informa que por tratarse de un producto de menor cuantía se cataloga como un error sin importancia y no se trabajaría para subsanarlo.
No todo es Felicidad
Otro tema que disgusto a muchos fanáticos de la marca y la tecnología fueron las filas que se formaron a la entrada de la tienda, teniendo en cuenta que una de las promesas de Amazon fue acabar con las filas.
Aunque la empresa anunció que el sistema de escáneres no incorpora reconocimiento facial, algunos activistas protestaron en frente de la tienda por creer que se trata de un programa de vigilancia y se encuentran en total desacuerdo ante estos modelos, ya que excluyen la labor humana poniendo en peligro las oportunidades laborales.
Si bien es cierto que todo este tipo de innovación tiene sus detractores y sus simpatizantes, no puedo ocultar la expectativa que genera este tipo de sistemas. Solo el tiempo dirá si tiene éxito o no.
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